El año está finalizando y las bandas comienzan sus despedidas, algunos aquí en la ciudad, otros de gira. Pero este sábado, Cielo Razzo dio lo que fue la primera parte de este “hasta luego”. El 2009 los encontrará de escenario en escenario, el verano en algún festival y sus fans detrás de ellos. Para saludar hasta el año que viene, Pablo Polilla Pino y su banda, dieron el primero de dos shows en su tierra natal. Por momentos arrolladores, en otros románticos o sentimentales, así se vivió el recital.
Como era de esperar, el show que dio Cielo Razzo en Willie Dixon fue muy bueno. Para destacar, el comienzo, una reversión electroacústica impecable de ‘Buscando más’. Pasados las cuatro primeras canciones, se dio lugar a un dueto de percusión entre Javier Robledo y Carlos Seminara, donde se lucieron con ritmos, agilidad y coordinación. Ningunos improvisados en su materia. Y por supuesto, el momento de la explosión, donde el público brilló, en el tema Qué se yo, Luna, Huracán y Televicio.
La puesta fue más novedosa que otras veces, al menos de sus presentaciones en Rosario. Esta vez tenían tres hileras de tubos de luces que iban variando su color, flashes y la iluminación habitual. Después de una larga espera, casi cerca de la 1 del domingo, se encendieron los equipos, las luces y espaciadamente fueron ubicándose de a uno para comenzar dos horas adrenalínicas.
El track list recorrió muchos de los temas de su última producción, Grietas, pero no dejaron de lado grandes clásicos que transforman el momento en una fiesta. Entre medio se hicieron varios enganches de canciones, con algunos arreglos que se dejaron entrever. Hicieron también el cover de Charly García que habían hecho en el Luna Park (el 20/09/2008), Promesas sobre el bidet. Acá es importante mencionar el sello propio que le han puesto a la canción, porque al escucharla, si bien se sabe es de García, lo han hecho con una excelente calidad.
Después de haber saludado a sus amigos de Degradé, “una gran banda de Rosario” en las palabras de Pino, hicieron una acotada reversión de Espina, “uno de sus mejores temas” (en alusión a Degradé). Nahuel Marquet y Julián Acuña (voz y guitarrista, respectivamente), frente al escenario, levantaron sus manos en agradecimiento a sus palabras. No es para menos. La banda más consagrada de la ciudad dijo frente a sus fans que el último disco de sus colegas, La hora azul, era uno de los mejores del año y que además habían logrado distribución nacional.
Cielo Razzo tiene la particularidad de demostrar en cada encuentro con su gente momentos de fiesta (con temas como Satiretalised, Luna o Luminoso), espacios sentimentales (con De caer o La cuna del sol) y momentos donde el sonido parecer absorberte por la potencia y adrenalina (así fue con Mamá y La roca, entre otros). Definitivamente, por algo este Cielo puede brillar con luz propia.
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